Hijos en guerras lejanas

Hace un tiempo conté la historia de Chiang Wei-kuo, el hijo (adoptivo) de Chiang Kai-shek, que sirvió como oficial en el ejército alemán y estuvo a punto de participar en la invasión de Polonia:


Pues si es chocante ver al hijo de Chiang Kai-shek posando en una fotografía con el uniforme de teniente de la Wehrmacht, lo es más si la ponemos junto a otra del hijo de su mayor enemigo luciendo el uniforme de teniente del Ejército Rojo soviético:


Mao Anying era hijo de Mao Zedong y su segunda esposa, Yang Kaihui. Nació el 24 octubre de 1922 en un hospital de misioneros cristianos de Changsha, la capital de la provincia china de Hunan. Un año más tarde el matrimonio tuvo a su segundo hijo, Mao Anqing, y seis años después nació el tercero, Mao Anlong. Aquella fue la única etapa en la vida del dirigente comunista en la que disfrutó de un hogar propiamente dicho. Pero sus obligaciones políticas le dejaban poco tiempo para estar con su familia. Cada vez con mayor frecuencia abandonaba durante meses a su mujer y sus hijos para emprender largos viajes por todo el país.

En 1927 los nacionalistas del Kuomitang tomaron Changsa. Mao dejó definitivamente a su familia para ponerse al frente de las guerrillas comunistas en la región. El abandono de su marido sumió a Yang Kaihui en una grave depresión. Llegó a pensar en el suicidio, aunque al final pudo más el amor por sus hijos y la responsabilidad de saber que solo la tenían a ella.

En 1930 los comunistas lanzaron una ofensiva contra Changsa. El intento de tomar el poder en la ciudad acabó en un completo desastre, y las guerrillas de Mao fueron derrotadas en unos pocos días de combates. Al finalizar la lucha, las fuerzas nacionalistas desataron una sangrienta represión contra los comunistas en toda la provincia. Yang Kaihui fue arrestada junto a Mao Anying, justo el día en que el niño cumplía ocho años. La madre fue ejecutada en presencia de su hijo mayor.

Tras la muerte de Yang Kaihui los tres hermanos se convirtieron en niños de la calle, condenados a dormir a la intemperie y a rebuscar en las basuras para comer. El pequeño, Anlong, murió de disentería con solo cuatro años. Hacia 1932 Anying y Anqing fueron acogidos por unos militantes comunistas de Shanghai. Las redes clandestinas de solidaridad comunista se hicieron cargo de la crianza y la educación de los dos niños. Mientras, su padre continuaba el ascenso al poder. Entre 1934 y 1935 el éxito de la Larga Marcha le convirtió en el líder absoluto de los comunistas chinos.

Fue entonces cuando Stalin fijó su atención en los hijos olvidados de Mao. En 1936 se ofreció a acoger a los dos niños en la Unión Soviética para proporcionarles una educación acorde con la relevancia política que había adquirido su padre (y de paso como modo de garantizarse una influencia en los asuntos futuros de China, aunque esto es de suponer que se lo callaría). Mao aceptó la invitación, y en 1936 Anying y Anqing llegaron a Moscú tras una breve estancia en París. Mao Anying vivió los siguientes diez años en la URSS. Su hermano pequeño tardaría aún más tiempo en regresar a China.

Cuando los alemanes invadieron la Unión Soviética, Mao Anying dejó los estudios para unirse al Ejército Rojo con el nombre de Xie Liaosha. Durante la guerra alcanzó el rango de teniente de artillería. Su hermano Anqing también sirvió en el ejército soviético por un breve tiempo, pero tuvo que abandonarlo cuando empezó a manifestar los síntomas de una esquizofrenia. En 1946 Anying regresó a China y continuó su carrera militar en el Ejército Popular. Anqing volvió un año más tarde. Pasó buena parte del resto de su vida ingresado en sanatorios mentales.

En octubre de 1950 Mao Anying llegó a Corea como traductor de ruso y asistente del mariscal Peng Dehuai, comandante supremo del Ejército de Voluntarios del Pueblo (el nombre que recibió la fuerza expedicionaria china en la guerra de Corea). Un mes más tarde, el 25 de noviembre, un solitario bombardero A-26 de la Fuerza Aérea Sudafricana atacó con bombas de napalm un conjunto de trincheras y tiendas que resultó ser el cuartel general chino. Anying murió en el bombardeo. Tenía 28 años.

2 comentarios:

  1. Muy curioso. Los vericuetos de la historia son impredecibles.
    Un saludo.

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    1. En realidad las vidas de los hijos de Chiang Kai-shek y Mao tienen muy poco en común, aparte de su paso por ejércitos extranjeros.
      Una historia triste, la de los hijos de Mao.

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